Hablar de Turquía es hablar de mezquitas, de especies, de historia, y de contraste de culturas. Turquía es uno de los países que hemos visitado que más nos ha impresionado por su belleza, su cultura, su mezcla de oriente y occidente, sus hermosos paisajes (sobre todo Capadocia) y la extraordinaria gente que conocimos en el viaje. Nuestro tour duró más de una semana que se repartió entre Estambul, Capadocia, Pamukkale, Esmirna, Éfeso, Ankara, Kusadasi. Voy a describirte primero los lugares que más nos gustaron de Estambul. Luego te contaré el resto del viaje, que creo que fue mucho más bonito, para mí, que la primera parte.
Estambul: mi pasión turca
Nuestro recorrido en Turquía empezó por Estambul, yo la definiría como ”La Ciudad de las Mezquitas” , hay alrededor de 3.000, una por calle más o menos; unas más grandes y más hermosas que otras. Debo decir también que ésta es una ciudad con el mayor contraste cultural de todo el país: muy occidental por un lado y muy oriental por el otro y es la ciudad más grande de Turquía. Aunque nos confundamos siempre, ésta no es la capital política, Ankara sí lo es, pero si es la capital administrativa del país.
Estambul es una ciudad partida por el Estrecho del Bósforo que la divide en dos partes, una en Asia y otra en Europa. Así es que ya puedo decir que en este viaje visité dos continentes al mismo tiempo, jajajaja.
Si hacemos un poco de historia, podemos remontarnos hasta el año 330 cuando a Estambul se la denominó Bizancio, posteriormente en 1453 fue llamada Constantinopla. Ya en 1930 recibió su actual denominación, Istanbul. Y la gran mayoría de su población es musulmana.
Nosotros estuvimos 3 días en Estambul, es que allí hay hay mucho por ver, por visitar, por caminar, por comprar, por comer. Pero creo que las cosas más importantes, las que valen la pena ver, según mi opinión son:
. La Mezquita de Solimán el Magnífico, una de las más bellas y visitadas. Fue construída por Solimán I, uno de los sultanes otomanos más ricos y poderosos de la historia. Impresiona a los visitantes por su tamaño, su sencillez, sus preciosos azulejos y vidrieras que proyectan la luz a través de sus cientos de ventanas.
. La Mezquita Azul, la más importante de Estambul debe su nombre a los miles de azulejos azules que adornan la cúpula de la mez quita. Un cosa común de las mezquitas son las torres o minaretes. Esta mezquita tiene seis minaretes lo cual provocó mucha polémica cuando se construyó, ya que la Meca también tenía seis. Pero para marcar la diferencia y calmar a los fieles, posteriormente, en la Meca se construyó una séptima torre. Lo que más me llamó la atención de este recinto fue su impresionante iluminación proveniente de sus vidrieras y de sus inmensas lámparas de araña que cuelgan del techo.
No olvidar que antes de entrar a esta y otras mezquitas se debe llevar ropa apropiada, nada pantalones ni faldas cortas, ni camisetas de tirantes, ¡ah! también piden que nos quitemos los zapatos antes de entrar. Además, las mujeres tenemos que llevar los hombros y el pelo cubiertos por algún pañuelo. Si no llevases nada, en la entrada te dejarán todo lo que necesites para visitarla como el que llevo en esta foto:
. Iglesia de San Salvador de Chora. Chora significa “fuera de la ciudad” y es que la iglesia se construyó en la parte exterior de las murallas de la antigua Bizancio. Lo más espectacular de esta iglesia son sus frescos y mosaicos bizantinos que están considerados como los mejor conservados del mundo.
. La Basílicia de Santa Sofía. Ayasofya como lo denominan en turco, es el símbolo de Estambul. Esta basílica me dejó perpleja por lo bonita que es. Es una de las obras maestras del arte bizantino. Entre 1204 y 1261, Santa Sofía fue la iglesia del Papa. En 1453 fue tomada por el Imperio Otomano y convertida en mezquita.
El interior de este recinto es sobrecogedor, la sala principal es muy grande, la iluminación, los enormes medallones decorativos y las columnas la hacen muy pero muy especial. Si subes a la segunda planta podrás encontrar diversos mosaicos como el del emperador Constantino y a la emperatriz Zoe adorando a Cristo.
. El Palacio de Topkapi, es el mejor reflejo de la época imperial en Estambul y simboliza el poder que alcanzó Constantinopla como sede del Imperio Otomano. Lo que más nos gustó del Palacio fue la sección denominada “El Tesoro” que cuenta con algunos de los objetos más valiosos del mundo, como el diamante del cucharero (un diamante de 88 quilates que perteneció a Letizia Ramolino, madre de Napoleón) o el puñal topkapi (el arma más cara del mundo, construido en oro con esmeraldas incrustadas) y “El Harén” lugar donde residía el Sultán y su familia más unas 800 mujeres.
. La Cisterna Basílica. Sinceramente no teníamos muchas expectativas con este sitio, pero fue uno de los que más nos sorprendió por la paz, tranquilidad y el fresco que sentimos dentro (cosa que se agradece en épocas calurosas).
La cisterna es un depósito que se construyó para que la ciudad tuviera reservas de agua en caso de ser atacada. Se le conoce también como el “Palacio Sumergido”, tiene cientos de columnas decoradas que fueron reutilizadas de antiguos monumentos
Si siguen hasta el final del recorrido se encontrarán con una sorpresa, unas columnas que tienen como base una cabeza de Medusa, el ser mitológico que convertía en piedra a quien mirara.
. La Torre Gálata. Para tener una vista panorámica de Estambul, tienes que ir a esta torre. Es una de las torres más antiguas del mundo.
. El Gran Bazar Turco. Hasta ahora puedo sentir el olor, los colores, el bullicio de ese inmenso y precioso bazar al que volví una, dos y hasta tres veces mientras estuve en Estambul con el pretexto de que había olvidado comprar alguna cosa. Perderse por sus callejuelas que te llevan hasta los comercios más variopintos es lo más. A tod@s los que nos gusta ir de compras, éste es el mejor lugar para hacerlo. Aquí puedes comprar regalos, lámparas, camisetas, joyas, antigüedades, etc. Eso sí nunca pero nunca te olvides que tienes que regatear, es imprescindible.
. Bazar de las Especies. Otro sitio que impacta por sus colores y olores es éste. Aquí podrás comprar los mejores dulces y especiesturcos. A nosotros el guía nos llevó a una tienda para probar té y algunos dulces, y para que nos explicaran los diversos tipos de azafrán que aquí está más barato que en España.
. Visita al Gran Cuerno de Oro. Este maravilloso puerto natural divide el lado europeo de la ciudad en dos partes: la ciudad vieja y la parte de Gálata. No debes irte de Estambul sin dar un paseo por el Bósforo en un barquito. El paseo dura una hora más o menos y podrás disfrutar de preciosas vistas y de hermosas casas de millonarios.
Mis curiosidades de Estambul
Quiero finalizar este mágico recorrido por Estambul puntualizando algunas cosas como:
- La comida es muy especiada y puede gustar o no a mucha gente.
- Si vas en verano deberás soportar más de 30 grados de temperatura
- Si subes a un tranvía, como nosotros lo hicimos, no te sorprenda que siempre va súper lleno, y quizá puedes quedarte fuera.
- Si logras entrar, te sentirás literalmente como en una lata de sardinas incluyendo el olor.
Yo recomiendo invertir tres días como máximo en esta ciudad y visitar lo que anteriormente hemos mencionado. Más días te pueden llegar a agobiar, porque la ciudad es muy caótica y ruidosa sobre en época de Ramadán.
Y si estás pensando en visitar China no te pierdas el artículo que ha escrito Lidia sobre su aventura en este precioso país.
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